Ventajas de los videojuegos en la enseñanza primaria y secundaria

Los videojuegos son un tema controvertido simplemente porque durante muchos años se consideraron un tipo de actividad que distraía a los jóvenes. El tópico del tipo que vive en el sótano de casa de su madre y se pasa el día jugando a videojuegos es algo que suele venir a la mente cuando se oye la palabra videojuegos. Lo cierto es que los videojuegos, en algunos casos extremos, pueden pasar de ser una actividad divertida a convertirse en una actividad adictiva y, en consecuencia, en una actividad que arruine la vida. Pero, ¿y si jugar a videojuegos fuera algo bastante beneficioso para los alumnos de K12 y para su éxito académico?

Puede parecer un poco paradójico el hecho de que se llegue a suponer que una actividad tan controvertida y supuestamente destructiva puede ayudar a los alumnos a aprender. Pero siempre hay dos caras de la moneda, ¿no? Últimamente, cada vez más investigadores afirman que el juego aporta bastantes beneficios. Un ejemplo habitual del valor educativo que ofrecen los videojuegos es la adquisición de conocimientos básicos de inglés por parte de hablantes de inglés no nativos.

En general, el aprendizaje a través de los videojuegos parece depender del contexto. Por otra parte, la investigación no ha demostrado que los juegos mejoren los resultados del aprendizaje. Incluso ser bueno en un juego no garantiza que esas habilidades se transfieran a otras tareas de nuestra vida.

Pero cuando el Distrito Escolar Unificado de Saddleback Valley, en California, introdujo los deportes electrónicos en su programa, los administradores observaron un aumento del trabajo en equipo y del compromiso de los alumnos participantes.

También está demostrado que los videojuegos mejoran la creatividad, la colaboración y la concentración. Los deportes electrónicos también fomentan la participación social de estudiantes que podrían tener problemas para integrarse.

¿Cuáles son las ventajas reales de los videojuegos para los alumnos de K12?

Mejor comunicación

Muchos videojuegos implican cierto grado de interacción entre los jugadores. De hecho, podemos afirmar que para ganar un partido la capacidad de comunicación es casi obligatoria. Este puede ser el caso de los juegos en equipo o multijugador, que se han hecho más populares últimamente. También se ha demostrado que los videojuegos ayudan a los estudiantes a sentirse más cómodos con la interacción entre iguales, simplemente por la capacidad que dan los juegos a los jugadores para compartir información, debatir o plantear ideas estratégicas.

Los videojuegos también promueven varias formas de interactuar, como los mensajes de texto, la voz, las videollamadas, etc. A través de los juegos interactivos, los jugadores están expuestos a diversos grupos de personas y culturas, lo que les hace más abiertos, comprensivos e informados. Un jugador tiene la capacidad de comunicarse con casi cualquier persona, independientemente de su nacionalidad o incluso de ciertas manías. Los jugadores también aprenden a defenderse con la palabra, ya que los juegos pueden ser muy competitivos y los jugadores utilizan un lenguaje agresivo para expresar su pasión. La defensa mediante la palabra puede ser un arma increíblemente valiosa que puede sacar a una persona incluso de las situaciones más difíciles.

Mejorar la conciencia espacial y la capacidad de resolución de problemas

Un estudio descubrió que jugar a videojuegos de acción mejora la capacidad de localizar un estímulo objetivo entre distracciones, una prueba que predice la capacidad de conducción. Un estudio relacionado con los juegos publicado recientemente en Psychological Bulletin descubrió que entre 10 y 30 horas de juego pueden ayudar a los estudiantes a mejorar su cognición espacial y su capacidad multitarea. Los jugadores aprenden rápidamente a detectar los objetivos entre las numerosas distracciones del juego. La repetición de este tipo de tareas ayuda alos jugadores a mejorar sus habilidades motrices inherentes a la vez que se entretienen. Esta intensa concentración también ayuda fuera del juego: una mayor rapidez de reacción y una mejor conciencia espacial ayudan tanto en los estudios como en las actividades extraescolares, lo que da a algunos alumnos confianza en sus capacidades.

Potenciar el trabajo en equipo y el pensamiento orientado al equipo

Como muchos videojuegos actuales están orientados al trabajo en equipo, la capacidad de trabajar en equipo se ve reforzada por ello. Mucha gente juega a videojuegos con sus amigos y con personas de todo el mundo. Este tipo de juegos exigen una buena colaboración para alcanzar los objetivos, y todos los participantes utilizan sus puntos fuertes para conseguirlos. De este modo, las personas comprenden tanto sus puntos fuertes como sus puntos débiles, así como lo que pueden y no pueden hacer. Esto también pone sobre la mesa el sentido de apreciar los puntos fuertes de los demás y darse cuenta de que todo el mundo está cualificado de distintas maneras.

Puede parecer una habilidad blanda, pero el trabajo en equipo ayuda a la humildad, al sentido de la amistad y al parentesco. En clase, el concepto de trabajo en equipo es muy importante. Los niños necesitan saber cómo conseguir objetivos y, por tanto, colaborar. Esas tácticas les preparan para ser ciudadanos funcionales en la sociedad. Así, los videojuegos ayudan a los jugadores a crear un sentimiento de lealtad hacia su equipo y les enseñan a ser eficaces trabajando con ellos.

Mejorar la capacidad de resolución de problemas

La mayoría de los juegos exigen alcanzar un determinado objetivo o completar ciertas tareas para ganar. Los jugadores trabajan durante largos periodos realizando la misma tarea repetidamente o se concentran intensamente en este objetivo concreto. En su camino hacia la cima, se enfrentan a diversos problemas, retos que deben superar para ganar. Como resultado, este intenso reto aumenta su capacidad de resolución de problemas y aún más si el reto se repite durante horas, incluso días. Esas habilidades son extremadamente valiosas para el éxito escolar y académico, así como para la carrera profesional posterior de una persona, ya que ningún problema le intimida después de luchar constantemente contra «problemas» en el mundo virtual.

Ayudar a los niños a aprender a trabajar de forma práctica y coherente

Los videojuegos, al igual que muchos trabajos del mundo real, requieren que tefamiliarices con un determinado proceso para poder completar las tareas. Este proceso requiere tiempo y esfuerzo para comprenderlo y llevarlo a cabo con eficacia; lo que los videojuegos ofrecen a los jugadores es una forma divertida de reconocer los procesos y utilizarlos para alcanzar los objetivos del juego. Esto, cuando se hace repetidamente, queda grabado en la mente de los jugadores. Los jugadores intentan enérgicamente aprender y luego aplicar lo que han aprendido. Estos esfuerzos hacen que el jugador sea coherente y práctico.

Mejora el aprendizaje en general

Todos los juegos tienen unas reglas claras. Tienes que aprenderte las reglas antes de jugar. Por lo tanto, hay que ponerse manos a la obra para aprender, la mayoría de las veces, mientras se juega, las propias reglas del juego. Esto puede hacer que los jugadores sean más pacientes a la hora de aprender, más tolerantes y humildes (entienden que no saben cómo funciona todo y que deben aprenderlo para ganar) y les da una apertura general hacia el aprendizaje, además de potenciar su curiosidad.

Aumento de la actividad física

Un estudio de Harvard demostró -por extraño que parezca- que los niños que jugaban a videojuegos deportivos se sentían con frecuencia motivados para dedicarse al atletismo en la vida real. Y algunos juegos, como Pokémon GO, obligan a los participantes a moverse por el mundo real y, por tanto, a hacer el ejercicio que su cuerpo necesita.

Hay otra razón por la que los juegos pueden ser buenos para enseñar ciertas habilidades blandas, como la resiliencia, la resolución de problemas y la colaboración: Nos ponen en estado de juego. Eso, a su vez, hace que asumir riesgos y fracasar -actos que normalmente intentamos evitar- forme parte del proceso, e incluso de la emoción. Los juegos son, para bien o para mal, la puerta de entrada de la mayoría de los estudiantes a la programación informática, así que aprovechemos las oportunidades STEM que ofrecen y sigámosles la corriente.

Al educar a los niños de una forma tan creativa y accesible, podemos ser testigos de un mayor éxito académico de los alumnos de K12 en un futuro próximo. Los videojuegos tienen un gran potencial, además de su valor como entretenimiento, ya que se han obtenido considerables ventajas cuando se diseñan para abordar problemas concretos o enseñar una habilidad determinada.

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